LA ALIMENTACIÓN ECOLÓGICA ES UN SINÓNIMO DE SALUD Y BIENESTAR EN TODO TIPO DE CIRCUNSTANCIAS.
Los nueve meses del embarazo son extremadamente importantes para preservar el futuro desarrollo saludable del niño y la alimentación es una de las vías de comunicación entre la madre y el embrión más trascendentes, por lo que será necesario modificar considerablemente la dieta durante este periodo.
Por lo tanto, además de todos los controles y exploraciones cruciales, debes tener cuidado con los productos que utilizas durante estos meses. Los estudios han revelado que los productos orgánicos y naturales (productos libres de químicos dañinos, hormonas, etc.) son un 25% más beneficiosos para las mujeres embarazadas.
Los ingredientes potencialmente tóxicos y no biodegradables que se encuentran en los productos convencionales atraviesan la placenta y llegan al feto. Dado que los bebés no pueden desintoxicarse hasta aproximadamente los 6 meses de edad, incluso una exposición mínima puede tener un impacto de por vida en el desarrollo de los sistemas de órganos.
Los productos orgánicos no contienen tales ingredientes y, por lo tanto, su uso permite que tu bebé se desarrolle sin obstáculos.
El uso de productos naturales y orgánicos es una decisión definitiva que todas las futuras mamás deben tomar; después de todo, estás cuidando tu cuerpo y a tu bebé.
En nuestro salón, estamos orgullosos de ofrecer productos naturales y ecológicos para el cuidado de la piel, como cremas faciales, champú y productos corporales y poder ofrecerte todo el asesoramiento posible.
Tu piel se vuelve muy sensible durante el embarazo y los productos químicos tóxicos en los productos convencionales se convierten en una receta para la irritabilidad de la piel y las reacciones alérgicas. Con los productos naturales orgánicos, no tendrás que preocuparte por una reacción adversa inesperada.
Y en el cabello…? Obviamente, tal y como te has imaginado, las hormonas con las responsables de esos cambios. Pero hagamos un análisis más en profundidad, en el embarazo el cabello cambia porque hay sustancias endógenas que influyen en el ciclo del folículo piloso.
Así, mientras en el primer trimestre de la gestación, la acción de la progesterona suele generar un cabello un poco más debilitado, con menos brillo y que se cae con más facilidad, a partir del segundo trimestre, con el incremento de los estrógenos, mejora y se retarda la caída espontánea diaria del cabello, será sobre todo a partir del último trimestre de la gestación, con el incremento en los niveles de estriol, que es un tipo de estrógeno, cuando se evidencie de manera aún más clara dicha mejoría capilar.
Durante el embarazo, el cuerpo de la mujer cambia de forma radical. El desajuste de hormonas que se produce durante este periodo es clave para la piel y, de no cuidarla como deberíamos, podemos sufrir las consecuencias de por vida.
Cada cuerpo es un mundo y, por ello, no todos reaccionan igual ante el periodo de gestación. A algunas mamás se les reseca mucho la piel y a otras, sin embargo, les sale un montón de acné y grasa.
Algunas apenas notan la aparición de estrías y otras necesitan bastante tratamiento para evitar que salgan o que vayan a más. Sabemos que todas nos preocupamos por la belleza durante este periodo.
Lleva consigo añadido un aporte extra de macronutrientes y micronutrientes por lo que la alimentación es muy importante para mantenerlo todo en orden, incluso el buen desarrollo del bebé.
Otra forma muy importante de adaptarse al embarazo es hacer ejercicio. No podemos olvidar esta parte en nuestro día a día, pues lo agradeceremos muchísimo en el momento de recuperarnos en el posparto. Durante el embarazo, y sobre todo después del parto, uno de los principales problemas a los que se enfrentan muchas mujeres son las estrías. Independientemente de lo que se haga para prevenirlas, en la mayoría de las ocasiones pasan a convertirse en una parte inevitable de la gestación.
Distintos estudios han encontrado que el uso del aceite de coco durante el embarazo puede ayudar contra las estrías, especialmente cuando se aplica directamente sobre ellas. Gracias principalmente a sus cualidades humectantes.
Después del embarazo también es común que surjan los pezones doloridos y agrietados, haciendo que la lactancia materna se convierta en algo doloroso. La aplicación del aceite de coco en los pezones puede ayudar a aliviar las grietas y todas las molestias relacionadas. Aunque siempre es mejor preguntarlo a tu matrona.
Esperamos que te ha gustado nuestro post de hoy, haremos otros hablando de todas las cosas eco que hay en el entorno de la maternidad y bebes…
Hasta la semana que viene 😉
